¿Está bien crecer ahora?

Después del último año, cada pregunta es una pregunta válida. “¿Deberíamos resguardarnos?” “¿Deberíamos seguir con el status quo?” “¿Deberíamos estirar las piernas un poco?”

Está bastante claro que de estos tres, el status quo no te lleva muy lejos. Ninguna compañía puede hacer las cosas de la manera anterior y esperar tener éxito en lo que vaya a ser la nueva normalidad. El escondernos tampoco es la mejor apuesta. Las compañías que utilizaron su tiempo de inactividad para actualizar las tecnologías han visto cómo su nueva flexibilidad les ayuda a navegar por cambios y desafíos imprevistos.

¿Pero estirarse un poco? ¿A dónde lleva eso?

A todas partes. Las compañías que están a la vanguardia del crecimiento en 2021 son aquellas que asumieron la turbulencia de 2020 y la transformaron en una especie de “cultura de restablecimiento”. Estaban dispuestos a reconsiderar sus procesos y estaban dispuestos a cambiarlos. Estaban ansiosos por reevaluar cómo se realizaban el trabajo y estaban felices de rehacer sus procedimientos. Fueron capaces de esforzarse cuando era más fácil contraerse y, en lugar de trazar la línea, la cruzaron y se comprometieron con el mejoramiento continuo.

La clave es el control.

Así que sí, está bien salir y volver a crecer. De hecho, como muestra este ​libro blanco conjunto de SAP Concur/Deloitte , muchos líderes comerciales consideran el 2021 como el año del crecimiento. Y lo están haciendo tomando el control de los costos.

Estos líderes (por cierto, financieros) han invertido en herramientas de gestión de viajes, gastos y facturas para obtener una ventaja: Saben lo que tienen que gastar, por lo que pueden tomar rápidamente decisiones definitivas que impulsen el crecimiento de la compañía.

No se preguntan qué se está gastando ni en dónde se encuentran sus presupuestos. Ellos lo saben, por lo que pueden actuar ahora. Están comprometidos a saber más.

• Invierten en inteligencia artificial y herramientas de aprendizaje de máquina que proporcionan analítica en profundidad de los gastos a la vez que señalan qué políticas funcionan y cuáles deben mejorarse.
• Establecen estándares sencillos de aprobación previa que les permiten controlar el gasto antes de que ocurra.
• Avanzan hacia una política de auditoría del 100 % y obtienen una garantía precisa y automática de que cada gasto y cada factura son correctos.
• Persiguen su cuota justa de 40,000 millones en la recuperación del impuesto al valor agregado y, debido a que tienen la tecnología para eliminar las complejidades fuera del proceso, lo están obteniendo.

La eficiencia siempre es más eficaz.

Los líderes de finanzas que invierten en estos cambios no solo quieren que las cosas vuelvan a moverse, sino que quieren que las cosas se muevan más rápido. La eficiencia lo es todo en los negocios, no es una sorpresa, pero en nuestro mundo posterior a la pandemia, nadie puede permitirse dejar que los procesos o procedimientos o la información inexacta les disminuya el paso. Ninguna compañía puede darse el lujo de tener “demasiados datos para usar”; deben ser capaces de tener acceso inmediatamente a exactamente los datos que necesitan y solo a los datos que necesiten. Deben seguir adaptándose como aprendieron el año pasado y ser capaces de hacer cambios de dirección repentinos pero significativos.

Las compañías tienen que hacer todo lo posible para superar los cambios en el mercado; sus rápidos ajustes son la única forma de seguir avanzando.

Este curso hacia el crecimiento, a través de la adaptabilidad, la eficiencia, el control de costos y las herramientas que lo hacen posible, se describen en el ​libro blanco, que destaca por qué este es el año para empezar.

Eche un vistazo, porque ahora es el momento.